Existen en Montevideo, ciertos sitios que deben asumir la responsabilidad de cumplir el rol de articulador en la ciudad. El mercado Central, pertenece a un posicionamiento estratégico, debido a su calidad paisajística e infraestructural. Es una pieza urbana que hilvana dos geografías de valioso apego colectivo como lo son la costa y la ciudad vieja.

El proyecto se propone asumir dicha condición, ser un elemento de sutura del tejido urbano. En este orden el edificio reconoce el contexto y tensiones que le dan sentido.

Se propone una plaza. Un espacio público verde con orientación norte, protegida de los vientos del sur mediante una pantalla vidriada de oficinas, recuperando de alguna manera, el carácter espacial que alguna vez tuvo el antiguo Mercado Central. Un plano verde, con contrapendiente al del terreno natural conforma una cuña pública. En la ausencia material, el parque da lugar para acceder al edificio quien se posa sobre el declive natural del terreno. La plaza contiene los programas públicos dispuestos gradualmente hasta encontrar los semi-públicos ubicados en la intersección con la pantalla, quien contiene las oficinas privadas de la CAF. Los programas de IMM y CAF, debajo de la plaza, quedan definidor por el sistema de circulación público. Sus múltiples accesos, dilatan el espacio a la vez que conforman los diferentes programas y su sistema de relación. Sobre la calle Ciudadela, en el nivel 0, balconean los programas de cines y Baar Fun Fun. A su vez la CAF, se divide en espacios de servicios y actividades reunitivas. Los servicios tendrán su acceso por la calle B. Mitre desde el exterior, y un sistema interno que comunica todas las áreas técnicas desde el interior.

Por otra parte un sistema de bandejas en doble altura contiene programas semi-públicos; por un lado organiza salas de reuniones, conferencias y usos múltiples, para las cuales se propone un sistema que no impide futuras mutaciones. El resto del espacio lo conforman los programas más "blandos" como foyer, galería de arte y biblioteca. El auditorio principal, también aprovecha la pendiente natural del terreno, y forma parte del sistema de relaciones que compone foyer y hall de acceso por la calle Canelones. Contiene un soporte técnico sobre la calle Bartolome Mitre, que le permite desplegar diversas configuraciones.

El comedor de la CAF articula la plaza y pantalla. El paralelepípedo ortogonal de 11 x 48 x 24 mts contiene todo el programa privado del banco. Las cajas de circulación vertical se disponen de manera tal que conforman un sendero central de circulación en planta y permite distribuir las oficinas sobre las fachadas norte - sur, con vistas al parque y al mar respectivamente. Se coloca una fachada ventilada sobre el norte descrita en la memoria técnica.